RESUMEN DEL CAPITULO 16

Holden marchó del hotel y se fue ha desayunar, más tarde, fue al parque haber si estaba su hermana Phoebe.

Cuando Holden terminó de desayunar se fue a pasear un poco y se imaginó a su madre y su tía pidiendo para los pobres en la puerta de unos grandes almacenes, como hacían las monjas que había conocido en el bar.

Holden había quedado a las dos con Sally Hayes para ir al teatro, por ese motivo se encaminó hacía Brodway para comprar las entradas y de paso buscaría una tienda de discos para comprarle un disco a Phoebe. Después se lo llevaría al parque ya que los domingos su hermana solía ir a patinar en el lago helado. Cuando llegó a Brodway estaba abarrotado de gente que quería ir al cine, Holden odiaba el cine. Tubo suerte y en la primera tienda de discos que entró encontró el disco que buscaba para su hermana. Lo compró aunque le cobraron cinco dólares, ya que era un disco muy difícil de encontrar; Phoebe se lo merecía todo. El disco hablaba de una niña que le habían caído los dientes y no quería salir de casa porqué le daba vergüenza de que la vieran sin dientes. Seguro que a su hermana le encantaría. Después compró las entradas para ir al teatro con Sally

Holden recordó que el año pasada su hermano D. B. les llevó a el y a Phoebe al cine a ver Hamlet, pero no le gusto mucho y a phoebe tampoco. Siempre tenía la sensación que los actores no actuaban con naturalidad, aunque en esa película actuara Laurence Olivier no le acabó de gustar.

Holden cogió un taxi y se fue al parque a ver si estaba su hermana para darle el disco, pero no estaba. Le preguntó a una niña que se estaba ajustando los patines si conocía a Phoebe y la niña dijo que sí , Pero que hoy no la había visto por allí. Holden ayudó a la niña a ajustarse los patines, la niña le dió las gracias y le dijo que quizás su hermana podía estar en el museo con los niños del colegio, pero hoy era domingo y al museo van los sábados. Holden recordó que cuando era pequeño cada sábado la maestra los llevaba al museo. Hacía allí se dirigió y por el camino recordó que le gustaba muchísimo ver la canoa con los indios remando y las mascaras pintadas, también había un esquimal pescando a través de un agujero en el lago helado. Holden estaba maravillado que cada vez que iba al museo todo estaba en el mismo lugar de siempre y sin embargo las figuras de hombres , animales y pajaros parecían vivos y que se movían.

Cuando Holden llegó a la puerta del museo no tubo ganas de entrar, así que lo que hizo fue coger un taxi para ir al lugar de la sita con Sally.